Las Playas de Loreto o cómo conservar la esperanza en un futuro feliz: "El Personal" y "La Mona Vegana" en el paisaje del rock | Un ensayo de Bernabé Galicia

La Mona Vegana

En entrevista para Cronorock, medio independiente que aborda bandas y artistas de rock y géneros derivados de este, en específico, propuestas mexicanas que están haciendo música interesante, Andrés Haro cuenta que, tras haber coincidido en la revista Galimatías, en Guadalajara, con Julio Haro, fundadores los dos de la banda El Personal, en los inicios de la agrupación, este “... no era músico, ni tampoco era mi hermano, …

Julio Haro nunca había sido músico antes de El Personal... Era un gran escritor Julio... era más escritor que músico, justamente, y las influencias venían de la música popular mexicana, …”, como podemos notarlo en el tema Dale de comer al conejito, en el que Julio Haro, “el ejemplo máximo de versificación del rock mexicano” (Pingüino Elemental), compuso la letra a partir de cuatro décimas y un estribillo de dos versos de arte mayor: “Dale de comer al conejito, / dale de comer que está chiquito”. Esta canción pertenece al primer álbum de El Personal, No me hallo, publicado en las postrimerías de la década de los años ochenta por Discos Caracol y reeditado, algunas años después, en España:


Tienes algo delicioso,

algo sensacional,

tu cuerpo es fenomenal,

y tu cabello, hermoso,

y lo más maravilloso,

quiero que sea para mí,

porque si andas por ahí,

voy a sentir gran dolor,

que en las cosas del amor,

no me gusta compartir.


Yo no quiero ser tu padre,

yo no quiero ser tu madre,

yo no quiero ser pariente, ¡ay!,

ni siquiera un buen amigo.

Yo lo que quiero contigo,

es asunto muy aparte,

es a picarte el ombligo,

a lo que aspiro yo tanto,

y por eso yo te canto,

para ver si lo consigo.


Yo sé que no soy el mismo

que cuando tenía quince años,

que ya se notan los años, ¡ay!,

en todo mi mecanismo,

pero veo con optimismo

que una nueva vida empieza,

tengo el alma en una pieza

y aunque ya la tengo amarga,

eso sí, la tengo larga,

todavía la tengo tiesa.


Ya no te voy a rogar,

ya tengo seca la boca,

ya sabemos que estás loca, ¡ay!,

y no se te va a quitar,

y ya deja de pensar

que por ti me estoy matando,

se me olvidó desde cuando,

se me quitaron las ganas,

las nalgas las tengo planas,

de tanto estarte esperando.



En la misma entrevista, Andrés Haro añade que No me hallo “... fue un disco muy sui géneris, muy original, en ese momento nadie hacía las fusiones que nosotros hicimos, de hecho, todavía nadie las hace porque, por ejemplo, el reggae, que empezamos a hacer fusiones de reggae, después sí surgieron muchos grupos pero de reggae, lo que se conoce como grupos de género, o sea, grupos de rock, grupos de reggae, grupos de blues, grupos de bolero, grupos de salsa, grupos de cumbia, pero en El Personal no éramos exactamente un grupo de género, no éramos ninguna de esas vertientes, sino que mezclábamos y tocábamos de todo, un danzón, por ejemplo, según nosotros un danzón, según nosotros un reggae, según nosotros un rock, …”.

A cuatro décadas de la formación de El Personal, proyecto musical que se gestó por el mero placer de hacerlo, sin alguna remota conciencia de la trascendencia e importancia que alcanzaría, Andrés Haro rememora los primeros pasos de la banda tapatía como quien recuerda a sus muertos y sus palabras resuenan al escuchar la banda La Mona Vegana y saber de su gusto por la música popular, como me confió Manuel Borja, compositor, voz y guitarra acústica de la agrupación, o al leer estas líneas que describen el proyecto artístico que este 2025 cumplirá nueve años de una presencia constante en diferentes escenarios de la ciudad de Querétaro: “... La Mona Vegana tiene como eje medular la creación de canciones de distintos géneros musicales y temáticos. Propuesta en la que historias simples, pero no ordinarias son contadas al ritmo de una peculiar amalgama de géneros musicales, al ritmo de huapango, blues, son, cumbia y reggae. Dando como resultado lo que la propia banda denomina folk garaje”, lo que nos trae a la mente El Personal y su “... forma única de componer con humor y ritmos tradicionales fusionados con el rock. …”, como se acota al pie del video del medio independiente que reseña la trayectoria de la agrupación responsable del álbum No me hallo, “... considerado como un gran disco para el rock mexicano, con canciones como ¡Niño, déjese ahi!, Dale de comer al conejito y La tapatía”.



Ahora bien, la canción Las Playas de Loreto, composición de Manuel Borja (Ciudad de México, 1979), de la que hay dos versiones para la misma letra, en tango y en ska, y cada una con propio matiz, es la historia contemporánea de un desamor, no falta el café en la oficina, el celular, el coach, las lágrimas por la ingrata ni el plan vacacional, es la crónica de la caída del héroe que lucha por hallar un asidero, pero en lo que está fundada su vida, en lo que cree con firmeza y le da sentido a su existencia, la capacitación en liderazgo y resiliencia, su amor propio, el consejo de su padre y el clonazepán, la compra inteligente en Amazon o en el Buen Fin, la nostalgia de un pasado mejor, Mario Bros y las redes sociales, el maratón por la mañana, el maratón de series y la comida por aplicación los domingos, el buen ejemplo y lo chingón que es ser mexicano, la homofobia y el machismo justificados, su clasismo, el pacto contra la amargura y la vergüenza, en fin, “... compensaciones sutiles que conformarán todas las rebeldías, …”, el karma y el inevitable bostezo, el termo personalizado y su fe inquebrantable en algo superior o, a lo menos, en la posibilidad de ser feliz algún día, es mentira, una falacia, una estafa, es solo apariencia, está hueco, vacío, carece de sustancia y gracia,


Pero tiene la esperanza

En un futuro feliz.

Furia estrujada en fe mansa,

A pesar de la tardanza

de la nada resurgir.


Pero tiene la confianza

Que sea un sueño febril

Toda esta vida de falacia.

Y despertar en la gracia

de un sábado de abril.


Como el hallazgo en el proceso de composición de Las Playas de Loreto así Manuel Borja califica su estribillo, un par de quintillas que acusan la filiación a la música popular y la cercanía a la delicada composición de Julio Haro, al desenfado de El Personal, en la forma y en el fondo, en la lírica y en la propuesta o idea musical. En tanto, la historia de nuestro héroe se torna más ridícula conforme se resiste a reconocer la farsa que le han plantado en las narices: “Era tanta la desgracia / Que escapó en el almuerzo / De la oficina rancia, / Y se fue al estacionamiento. / Perdiendo la vertical / Y el café en un movimiento.”, cuando, por último, tras la lágrima discreta en el bar, descienda al fango.


La Mona Vegana

Las canciones de La Mona Vegana se pueden escuchar en la plataforma Bandcamp y en el canal de Youtube de la banda así como en el canal de Manuel Borja, donde podemos hallar la interpretación en vivo de Las Playas de Loreto, en la Pulquería "El Borrego", en la colonia Linda Vista, en la zona histórica de la Otra Banda de la ciudad de Querétaro, en el medio de la resaca neoliberal, ejecutada a ritmo de ska por Iván Roditi en la guitarra eléctrica, Juan Pablo Carbajal en el bajo, Samuel Flores en la batería y Manuel Borja al frente de la agrupación, en tanto esperamos el lanzamiento de la versión en tango grabada en estudio.


Referencias

Bandcamp. (30 de julio de 2024). La Mona Vegana. Recuperado el 18 de febrero de 2025 de Música | LaMona Vegana

Cronorock. (19 de abril de 2023). La historia de El Personal. La Historia de El Personal - CRONOROCK

El Personal - Tema. (8 de noviembre de 2014). Dale De Comer Al Conejito (studio) [Archivo de Vídeo]. Youtube. Dale De Comer Al Conejito (studio)

Manuel Borja. (3 de febrero de 2023). Las playas de Loreto. La Mona Vegana [Archivo de Vídeo]. Youtube. Las playas de Loreto. La Mona Vegana

Pingüino Elemental. (4 de junio de 2010). Nosotros somos los marranos. Las 100 mejores canciones del rock mexicano. Las 100 mejores canciones del rock mexicano: JULIO HARO

Querétaro a 18 de febrero de 2025



Bernabé Galicia (Ciudad de México, 1981) tiene publicados poemas, artículos y ensayos en antologías, revistas y medios nacionales e internacionales, así como el monólogo ¿Le pasó esto alguna vez a Cervantes? (Herring Publishers, 2013). Ha sido traducido a la lengua totonaca y al náhuatl, y sus poemas han sido incluidos en las antologías del Grupo Cultural OCCEG de Papantla, Veracruz, Arpegios de la palabra, Las vainas de mi palabra e Inopia y en la antología Renacer en primavera de Ediciones Afrodita (Córdoba, Argentina).


Imágenes:

1. La Mona Vegana en la Pulquería "El Borrego": Juan Pablo Carbajal, Iván Roditi, Manuel Borja y Samuel Flores.

2. La Mona Vegana en la Pulquería "El Borrego" con Baruc Rangel en la guitarra.


📚 Lee otra obra de este autor (en Herederos del Kaos): "El Evangelio según Saramago" ( Ensayo).




No hay comentarios:

Publicar un comentario

ENTRADA DESTACADA

"Entrevistas y reportajes" en el mundo de las letras y las artes escénicas

Esta selección de entrevistas y reportajes realizados por Juan Carlos Vásquez para diversos medios y revistas, reúne a una amplia variedad ...